domingo, 3 de octubre de 2010

Cap 1: La llamada

Pov. lara

Rah-rah-ah-ah-ah!
Roma-Roma-ma-ah!
Ga-ga-ooh-la-la!
Want your bad romance

Tomo mi celular y apago la alarma. En cuanto me quito las cobijas siento el frio entrar a mis poros. No me gusta levantarme temprano, pero tenía que ayudar a mi madre.
Además de ser un trabajo de verano.
Estamos a mediados de Junio y el restauran iba muy bien.
Mi madre es la mejor cocinera del mundo, pero algo desorganizada.
No es que yo lo fuera pero lograba que mi madre tuviera las ideas en su lugar.

Estoy algo adormilada y camino Asia al baño. La casa en si es algo chica, de dos pisos, tres recamaras y un baño. Pero el jardín es grande, mi abuela tiene manos mágicas, lograba que todo en el jardín tuviera vida. Ama las rosas y más de la mitad del jardín esta llenas de ellas, un árbol de manzanas que aun no logro entender cómo es que sigue vivo.
Pero creo que lo más hermoso de la casa es el porche. Es largo, tiene 3 escalones, una enredadera por todo el barandal derecho. Con una mecedora de madera donde algunas tardes mi madre y yo nos sentamos. Me gusta mucho esa mecedora, me encanta recostarme sobre ella y balancearme.
En la casa se habla español más porque mi abuela no le gusta hablar mucho el ingles.
Cuando tenía 7 años y vivía en México, mama viajo a Forks para ayudar a una amiga al pasar un año esa amiga creyó que el restaurant no tenia futuro a sí que mama lo compro cuando logro tener éxito nos llevo a vivir con ella. Yo tenía 9 años.
Entro al baño a lavarme la cara, el agua es fría y eso me despertó. Regreso a mi cuarto.
Las paredes están pintadas de color morado, mi cama es pequeña con sabanas blancas con líneas moradas y un dosel que estaba desde el techo hasta el piso, de tela blanca con algunos detalles en morado y unas pequeñas mariposas bordadas. En mi escritorio esta mi laptop, mi ipod y colores. Cerca de la ventana esta un librero, con todos los libros que poseo. Algunos posters pegados y mi closet.
Abro las cortinas y una luz blanca inunda mi cuarto. Está nublado y sonrió. Voy a mi closet saco un pantalón de mezclilla entubado la blusa polo color azul marino con el logo del restaurant en la espalda y enfrente en el lado derecho mi nombre bordado en letras manuscrita., tomo una blusa de manga larga color blanco y mis convers negros.
Cepillo mi cabello, delineo un poco mis ojos y me pongo un poco de brillo.
Bajo las escaleras y mi madre está en la cocina tomando café mientras lee el periódico.
-Buenos días mama- camine asía ella y le di un beso en la mejilla
-Hola cariño, lista para trabajar- pregunto mi mama con una gran sonrisa.
-Claro ¿Y la abuela?- la empecé a buscar con la mirada.
-Afuera, regando su jardín.- mama termino su café.
Subí corriendo las escaleras, tomo mi bolsa metí mi celular, mi ipod, la cartera, un espejo y un brillo labial, tome mi chamarra café me puse mi collar con el cuarzo negro.
Baje las escaleras corriendo y Salí al patio. El olor a pasto húmedo ere agradable.
-Mama, ¿Para qué riegas las plantas? Lloverá en un par de horas- le decía mi mama a la abuela.
-No importa, ellas necesitan mucha agua y más en este tiempo- le decía mi abuela calmada mente.
Mama le iba a responder, cuando me voltea a ver.
-Excelente, vámonos Lara- dijo mi mama con una sonrisa
-Adiós, abuela- le dije mientras le daba un beso en la mejilla
-Mama en cuanto empiece a llover entra a la casa- mama también le dio un beso y ambas subimos al auto.
Cuando llegamos al restaurant ya estaba abierto de ello se encargaba Sara una joven de 23 años muy agradable y responsable.
A las 7:30 abrimos el local, mama y Deel empezaron a cocinar. Sara, Grace y yo empezamos a ordenar las mesas con los servilleteros, menús y otro condimento.
Los primeros clientes como siempre fueron Martin el dueño de la ferretería, la señora Newton y Charlie Swan.
Martin siempre se sentaba en una de las mesas más alejadas y siempre lo atendía Sara que era la que aguantaba su falta de decisión y sus cambios de último momento. La señora Newton tomaba la mesa más cercana a la puerta y tardaba por lo menos 20 minutos en ordenar Grace y ella platicaba de los últimos chismes mientras ella elegía. Charlie Swan el jefe de policía se sentaba en la barra, el solo iba los lunes, miércoles, viernes y algunos domingos. Los demás días asistía al otro restaurant de forks. Charlie era ese tipo de hombre con un encanto serio y reservado. Además era algo melancólico.
Me gusta tomarle la orden, porque el elije rápido y no es desidioso.
-¡Buenos días Jefe Swan!- dije mientras le sonreía
-Hola Lara ¿Cómo te va?- pregunto Charlie con los ojos algo adormilados.
-Bien aquí Trabajando ¿Qué va a ordenar?-
-Un café negro, huevos rancheros y una concha- dijo mientras me sonreía apenado.
-Ahora se los traigo-
Entre a la cocina y le di la orden a mama, tome una taza y la jarra del café. Salí y puse la taza frente a Charlie y la llene.
-Y bien Lara ¿Algún Problema en tu vida?- pregunto Charlie como todos las mañanas.
- Pues en realidad ninguna, aun no entro a la escuela así que todo está en orden- le conté mientras sonreía.
-Entraras a preparatoria, pero si apenas tienes 14 años- dijo Charlie.
- El 19 de octubre cumpliré 15 Charlie, además soy un súper Genio no lo olvides-
-Sí, que rápido crecen, tu mama a de estar muy orgullosa de ti-
-Si-
-¡ORDEN LISTA!- grito Deel, del otro lado de la ventanilla que daba a la cocina.
Tome el plato de Charlie y se lo di.
Llevaba varios días dándole vueltas al asunto, sabía que la única persona que podría ayudarme era Charlie, pero también podía acusarme.
-Oye Charlie, sabes de alguien que pueda arreglar un auto- pregunte muy bajo para que mama no oyera
-Si ¿Por qué?- pregunto curioso Charlie
-La abuela me compro un auto usado, pero quisiera que alguien lo arreglara, pero si lo llevo al taller Joshua se lo dirá a mama- le conté a Charlie.
-Si conozco a alguien Lara, pero no creo que sea buena idea, tu madre me mataría si se entera que te ayude a arreglar el auto-
Puse mi manos sobre la barras y los puse como si rezara además de usar los ojos de cachorrito.
Cuando llegue a Forks, Charlie fue el primero que conocí, mama y el eran amigos. Charlie es lo más cercano que tengo a un padre, al cabo de unos días me dijo que era igual a mi madre de enfadosa. Además dice que le recordaba un poco a su hija, aunque yo estoy llena de vida y de sonrisas.
-Te ayudare, pero promete que se lo dirás a tu madre ¡HOY!- dijo Charlie mientras me señalaba con el tenedor.
Le sonreí y dije que sí.
Me dio un número y una dirección. Dijo que el chico se llama Jacob Black, que el arregla autos mucho mejor que Joshua, pero más barato.
No estaba muy segura pero no perdía nada. Charlie me dijo que lo llamara ahora mismo, porque casi nunca está en casa.
Salí del restaurant tome mi celular y marque el número.
-¿Diga?- una voz de hombre bastante dormido me contesto.
-Buenos días, ¿se encuentra Jacob Black?- pregunte algo nerviosa
-Sí, ahora te lo paso- dijo al hombre amablemente-
Se escucharon varios movimientos del otro lado de la línea, el hombre grito el nombre del chico, el pregunto qué quería.
-Te llama una chica- dijo el hombre
-¿Una chica?- pregunto.
-¿Diga?- la voz del chico era gruesa.
-Sí, ¿Jacob Black?- pregunte Nerviosa
-Si soy yo ¿Qué deseas?- dijo el sin basilar
-¡Ahh! Si Charlie me dijo que tú arreglas autos-
-¿Charlie dijo eso?- el chico soltó una carcajada tan agradable que me hiso reir.
-Sí, tengo un auto y quiero que alguien lo arregle, pero si lo llevo al taller de Joshua mi madre se enteraría…-
-Un momento- me interrumpió- ¿Charlie te esta ayudando para mentirle a tu madre?-
-No a mentir más bien a ocultárselo, hasta que sepa como decírselo, además si lo tengo ya reparado, mama no tendrá como oponerse- me defendí
El chico volvió a reír
-Bien ¿Qué auto es?-
-Una cherokee del 97, falla mucho, los frenos no sirven bien y tiene un ruido extraño-
-mmm, interesante ¿Dónde lo tienes?-
-En la cochera-
-¿Y tu mama no se ha dado cuenta?- pregunto divertido
-No, mama es demasiado despistada, además ella odia la cochera-
-Vale, iré a recogerlo y lo traeremos a mi casa ¿Te parece?-
-Claro ¿A qué hora?-
-A las 3-
-Si, perfecto, hasta las 3- y va colgar cuando Jacob me detuvo
-Espera, dame tu dirección-
Me rei y le di mi dirección
-Otra cosa ¿Cómo te llamas?- pregunto Jacob
-Lara Sanchez-
-Bien, yo soy Jacob Black-


































sábado, 2 de octubre de 2010

Personajes

Lara Sánchez:
Tiene 14 años, Vive con su madre soltera y su abuela extraña. Su madre compro un pequeño local en Forks, Washington que convirtió en un Restaurant.
De nacionalidad mexicana. No le gusta hablar de su padre. Le gusta el frio y la lluvia.
No sale de su casa sin su ipod morado, su collar de la suerte y un suéter.
Ama la mermelada de fresa, el chocolate y cualquier tipo de fruta. Es despistada y graciosa. Odia las matemáticas pero es buena para ello. Le gusta correr y bailar. Pasa la mitad de su tiempo Leyendo.

Jacob Black:
Aparenta más de 20 años aunque es mayor. Vive en la reserva de la Push con su padre Billy.
La mitad del tiempo anda por el mundo sin camisa unos short de mezclilla y tenis. Mostrando un tatuaje. Siempre está con un grupo de chicos y parecen una manada.
Le gusta arreglar Autos y motos. Come todo lo que está a su paso. Tiende hablar de más. Es orgulloso y algo testarudo. Es aventurero y tiene una temperatura de 42,7 ºF.
Le gusta escuchar Hip-Hop y Rock. Le gustan los deportes.
Le gusta estar en su pequeña sala viendo algún partido de Futbol con su padre.
Parece un chico rudo, pero a veces actúa como un romántico. Quiere mucho a sus amigos y familia. Extraña a su madre Sara.
Es un licántropo.

Ben Thompson:
Un chico de 16 años aunque parece de 20.
Va a la escuela con Lara Sánchez, pero en cuanto el reloj marca las 3:15 él se despoja de su camiseta y pasa todo el tiempo con Jacob Black y su Primo Sam
El vive con Sam y su prometida Emily, desde que sus padres se separaron.
Le gusta jugar videojuegos, correr por el bosque y pescar.
Es un tipo serio pero gracioso. Tiene ideas extrañas y desconfía un poco de los que no son quileute.
Cree que estudiar es una pérdida de tiempo. Le encanta los panecillos que cocina su prima Emily. Toca la guitarra y odia literatura.

Renesmee cullen:
Tiene 15 años. Pertenece al Clan Cullen.
Es una chica curiosa y extraña. Casi no habla.
Es Hermosa pero algo tiene que aleja a las personas.
Escucha música clásica. Toca el piano. Es brillante y alegre. Viste siempre a la moda aunque le incomoda.
Es celosa y posesiva. A veces no sabe lo que quiere. Es alegre y chistosa.
Sus padres son demasiado jóvenes para tener una adolecente. Le encanta dibujar y discutir con su tío Jasper sobre la Guerra civil.
Le gusta pelear con su tío Emmet, leer poesía con su madre y tocar el piano a dúo con su padre.

Alec Vulturi:
Parece de 16 años pero tiene mas de 300.
Aunque tiene una mirada extraña teñida de rojo.
Es un alma torturada, pero con algo de amor dentro.
Parece un Ángel aunque él se describe como el mismo diablo. Le gusta leer y coleccionar objetos de poco importancia. Le encanta la historia e interrumpir a los demás.
Es gracioso con un toque de maldad.
Le gusta pasar tiempo solo sin nadie a su alrededor. Aunque es de tiempos muy remotos esta al tanto de la tecnología y le parece gracioso la serie de Desperate Housewives. Y por extraño que parezca le gusta bail

viernes, 1 de octubre de 2010

A veces creía saber a donde iba, creía entender lo que pasaba a mi alrededor.
Pero nunca me percate de que mi destino estaba escrito y sellado. Aquellas palabras que dijo esa mujer me marcarían por siempre, -el ultimo día de otoño ere mi limite pera decidir-.
-¿Decidir qué?- pregunte algo confundida. La Gitana me guiño un Ojo – a su tiempo- su voz sonaba como en un sueño. Camino hacia el atardecer de regreso a su puesto y a su paso se escuchaba unos cascabeles, se giro a verme y dijo – Presta más atención y veras las señales-
Al pasar los días se me olvido la existencia de aquella Gitana.
Nunca vi las señales, tal vez por lo distraída que soy, pero ahora …..